Una resonancia magnética nuclear (RMN) es un método de diagnóstico altamente fiable y eficaz. Mediante esta prueba se pueden visualizar y recoger imágenes de las estructuras internas de nuestro organismo procesadas mediante ondas magnéticas.
Para realizar esta prueba simplemente el paciente debe acostarse en una camilla que se introducirá en una cámara tubular mediante la cual se recogerán las imágenes. Previamente el paciente debe quitarse objetos metálicos, joyas y demás enseres.
Esta prueba, dependiendo de la zona que se requiere examinar, puede durar más de una hora. En ocasiones –y con previo aviso-, ante la claustrofobia y ansiedad de los pacientes al sentirse encerrados pueden solicitar que se les administre un sedante para relajarse.